Tendemos a obtener en la vida lo que estamos dispuestos a tolerar. Si permitimos que otros nos falten el respeto, nos faltarán el respeto. Si toleramos el abuso, abusarán de nosotros. Si pensamos que está bien trabajar más de la cuenta y que nos paguen poco, ¿imagina lo que pasará?
Si no tenemos un plan y propósito para nuestras vidas, ¡Nos convertimos en parte de los de otra persona!

Tu vida puede cambiar, y tú puedes marcar la diferencia, sin importar que tipo de trasfondo tengas o de dónde vengas. No importa cuáles hayan sido tus traumas o qué errores hayas cometido, porque puedes aprender y crecer. Tú puedes convertirte en la persona que puedas llegar a ser en base a tu potencial; tan solo necesitas creer en ti y comenzar.

Cada vez que des un paso, ten un pensamiento positivo, toma una buena decisión, pon en práctica una pequeña disciplina, estarás un paso más cerca de tu destino. Sigue avanzando y sigue creciendo.